Fuente de estabilidad y evolución

Los mexicanos y el maíz mantienen una estrecha relacióncimentada en un fuerte vínculo ancestral, ya que desde su domesticación se ha posicionado como base de la alimentación, tornándose paulatinamente en un bien estratégico, lo que a la vez lo ha llevado a mayores niveles de perfeccionamiento y especialización dentro del ámbito agronómico, con significativos avances genéticos e importantes mejoras en las prácticas y sistemas de producción, transformado con ello al cultivo en uno más estable y productivo a través del tiempo.     

Su alto valor nutricional ha dado pie a la elaboración de una extensa gama de comestibles, siendo además indispensable en el desempeño de actividades pecuarias. Conforme a su uso es posible mencionar dos vertientes generales, maíz para la obtención de forraje o para la producción de grano; la importancia del primero radica en que provee un alto rendimiento de materia seca en comparación con cualquier otro cultivo en el mismo ciclo de producción, constituyendo así una valiosa fuente de nutrientes que mantiene la salud del ganado y promueve su correcta reproducción, y por otra parte, la trascendencia del maíz destinado a la obtención de grano estriba simplemente en ser la base alimenticia de la población.

“A pesar de los grandes contrastes que la modernidad plasma en el campo, y los enormes riesgos que la agricultura conlleva dada su naturaleza, gradualmente hemos sido testigos de cambios positivos dentro del concepto del cultivo de maíz, esto a través del desarrollo y aplicación de herramientas tecnológicas de apoyo y a un acompañamiento efectivo, así como gracias al conocimiento adquirido que nos deja el desempeño de esta labor con el paso de los años, generando con ello un enfoque más amplio que nos permite entender a mayor profundidad la interacción existente entre las plantas y los diferentes componentes de su entorno, no solo el agroclimático, sino también el social y el económico”; así lo determinó el Sr. Carlos Omar Ojeda Saldívar, quien lleva alrededor de 6 años dentro de la producción agrícola, y en el reciente ciclo primavera-verano 2020 estableció en conjunto con el Sr. Juan Pablo Elías una importante superficie de maíz para su aprovechamiento como forraje, a través de pastura molida, esto en suelos próximos a la localidad de La Cañada, perteneciente al municipio de Jerez, Zacatecas, terrenos dentro de los cuales además se sembró en una área de 3.5 hectáreas una valiosa vitrina productiva bajo el sistema de riego por goteo con agua de la Presa La Tortuga, donde se comparó la eficiencia de un amplio portafolio de variedades constituido por 8 híbridos de maíz blanco comerciales con características sobresalientes.

“Sin duda el avance es palpable, siendo que cuando empezábamos a trabajar, los primeros maíces que sembramos fueron de temporal, esperanzados a ver que Dios nos daba, sin dejar de hacer las cosas lo mejor que podíamos, pero sin embargo no teníamos nada de asesoramiento técnico, simplemente hacíamos las labores como se hacen tradicionalmente en la región, siguiendo el empirismo con el que contábamos, pero realmente llevábamos muy poca o ninguna mejora, sencillamente estábamos en lo mismo, ni siquiera habíamos manejado maíces híbridos, por lo regular puros criollos, pero a partir del año pasado ya nos aventuramos un poco más y decidimos meter un híbrido, aunque todavía con riego rodado, por lo que realmente no vimos los mismos resultados que ahora podemos observar con goteo y con el acompañamiento de las diferentes empresas que nos respaldaron para sacar adelante este ensayo en el que sin duda se constató el desarrollo genético y tecnológico, tales como Asgrow, Aspros, CB, Caloro, Basf, Yara, Syngenta, IrriCorp, Agroproductos El Cedro, Agro Jerez, entre otras, quienes lo primero que nos recomendaron pertinentemente fue la realización de un análisis de suelo, el cual tampoco nunca lo habíamos hecho por lo que simplemente no sabíamos a ciencia cierta como estaba el terreno, el cual salió alto en nitrógeno pero también muy alto o saturado de sales, lo que no permitía de inicio que despegaran las plantas como se esperaba, no obstante con el apoyo de los técnicos después de 22 días de batallarle logramos que el cultivo repuntara y expresara características bastante sobresalientes”.

“Con esto definitivamente confirmamos, que para lograr avanzar incrementando la calidad y el rendimiento, tienen mucho que ver componentes como el híbrido, el manejo agronómico, el cuidado y apego al suelo, así como el monitoreo constante de las plantas y su entorno para determinar en tiempo y forma necesidades sanitarias y nutrimentales del cultivo, entre otro sinfín de factores que como productores tenemos que comprender y dominar si el deseo es mejorar y ser cada día más competitivos. Por estas razones, y por una mayor practicidad y eficiencia, tenemos que tener en cuenta la importancia que juega el empleo de genética avanzada a través de la implementación de semillas híbridas de alto potencial productivo, las cuales poseen cualidades y fortalezas únicas que conforme a una conducción apropiada pueden ser base en la expresión de resultados positivos, en ese sentido se sembraron materiales de la compañía semillera Asgrow puestos a disposición por su distribuidor en la región Agro Cid, tales como el reconocido híbrido Berrendo, una excelente combinación de rendimiento y calidad, con la fortaleza principal que su propio nombre refleja, una gran rusticidad y capacidad de adaptación, de ciclo intermedio, tolerante a fusarium, así como Antílope, virtuosa variedad, llamada el gran salto del rendimiento, la cual es igualmente de ciclo intermedio con potente vigor y despegue inicial, de muy buena sanidad foliar, por lo que algo que se puede presumir de la misma es su gran uniformidad, y el nuevo y exitoso maíz Salamandra, de reciente introducción, del cual estamos muy satisfechos, ya que logró manifestar características favorables como un mayor cuateo y gran tamaño, signos de rendimientos sobresalientes, por lo que sus expectativas para temporadas subsecuentes son bastante alentadoras”.

“También manejamos dos variedades de Pioneer; Hércules de Aspros, híbrido que muestra un excelente vigor inicial, además de gran estabilidad, de tallos y raíces fuertes, ciclo vegetativo intermedio con 185 a 190 días a cosecha, distribuido por Agroproductos El Cedro; de Caloro se sembró el MIIA350, un versátil doble propósito, representado en la zona por Veterinaria La Granja; y de CB se estableció el nuevo híbrido CB-100, resistente a fusarium, de tallos fuertes y gran sanidad foliar, distribuido en la región por Agro Jerez; es importante precisar que el manejo es el mismo para todas las variedades y lo que desarrollaron fue lo que cada genética trae. De todos estos materiales, nosotros hemos visto en el par de años que llevamos trabajado con híbridos, que aquí en esta región los que se nos han dado mejor son los Asgrow, aunque aquí en esta parcela no tenemos una de las variedades que más nos ha gustado que es Camaleón igualmente de Asgrow siendo que es la que más nos ha funcionado aquí en estos terrenos, pero Berrendo nos está dando una grata sorpresa, sin antes haberla probado, ya que es la que mejor se ve, mostrando notables características, pero todavía sería cuestión de volverla a probar y evaluar sus rendimientos por hectárea”.

“Aparte de la genética también cabe reconocer la importancia del acompañamiento, que nos impulsó a realizar muchas cosas que normalmente nunca habíamos hecho, lo que nos deja grandes enseñanzas y mucha experiencia, con lo que nosotros podremos ir cambiando nuestra forma de trabajar, pasando de un desempeño tradicional a uno más tecnificado. De esta forma hemos comprendido que si nuestra intención es alcanzar una alta producción tenemos también que fijar altas densidades de población con una mayor fertilización o nutrición, en ese sentido, establecimos alrededor de 98 mil plantas por hectárea, dispuestas a doble hilo con una cintilla para el riego por goteo en la parte central del surco, una separación entre hilos de 50 centímetros, un distanciamiento entre plantas de 20 centímetros, y una cama de siembra de 90 centímetros de ancho, con una fecha de siembra del 3 de junio 2020, dicho diseño de la parcela se realizó con la idea de darle el espaciamiento correcto al cultivo y con ello un mayor confort, evitando una alta competencia por recursos como agua, aire, sol y nutrientes, tratando de agilizar con ello el desarrollo, además bajo tal sistema productivo se facilita la aplicación de fertilizantes solubles y líquidos, ahorrando en el tema de la cinta, ya que con una sola o con menor inversión regamos la doble hilera o más plantas, aumentando así la eficiencia dándonos el incremento en rendimiento de acuerdo al recurso agua con el que contamos”.

“Conforme a los requerimientos del cultivo, la etapa de desarrollo, y una observación constante de las diferentes condiciones del suelo y las plantas, es como determinamos la nutrición, sin dejar de lado la importancia de partir de un análisis del terreno, como lo hicimos en este ciclo, para conocer las características y propiedades con las que contamos, lo cual nos permitió definir la fertilización en tipo y cantidad con mayor precisión. A grandes rasgos metimos alrededor de 8 fertilizaciones, de esas, nada más 2 fueron pesadas, que fue la de fondo y la del repaso, las restantes 6 fueron inyectadas por medio de la cintilla, y en esta ocasión no aplicamos foliares; para ello empleamos en su mayoría productos de Yara, metiendo así a la base 300 kilos de fertilizante granulado por hectárea, luego 400 kilos en el repaso, posteriormente en cantidades menores pero de mayor concentración 2 granulados más, y ya después fueron puros líquidos, con ello más o menos calculamos un costo de 45 mil pesos, entre fertilizantes y agroquímicos, en las 3.5 hectáreas de la parcela de ensayo”.

Para finalizar, el Sr. Ojeda Saldívar añadió; “aquí nos enfocamos bastante en el tema de la sanidad del cultivo, ya que entendemos que para que los maíces muestren su máxima expresión productiva, dependen además de una aportación óptima de agua y nutrientes, de un control temprano de malezas, así como de plagas y enfermedades, teniendo en cuenta que sino combatimos eficientemente las principales alteraciones del cultivo, lo más seguro será una disminución en el rendimiento y por tal motivo una pérdida económica como productores, siendo que prácticamente desde que depositamos la semilla, existe el riesgo de la presencia de organismos que interfieran en el desarrollo normal de las plantas, como gusano de alambre, gallina ciega, gusano cogollero, gusano soldado, araña roja, por ello la necesidad de estar constantemente monitoreando e implementar herramientas útiles de control, criterio por el que manejamos un línea muy completa de herbicidas e insecticidas, así como de algunos organismos benéficos”.

“En términos generales fueron 4 fumigadas contra gusano cogollero, empleando en 2 de ellas el insecticida foliar de amplio espectro Ampligo el cual derriba cualquier tipo de gusano, con un valor de 4,500 pesos el litro, suficiente para 9 hectáreas, lo que definitivamente nos dio un gran margen de protección, después aplicamos el insecticida Zierra, el cual también nos funcionó muy bien, por lo que prácticamente barrimos con la plaga, consiguiendo así una parcela muy limpia y sana, lo que suprime daños y competencias negativas, liberando el poder máximo de las plantas; además, para el gusano elotero, manejamos crisopas, que son insectos benéficos depredadores que ejercen un control natural sobre varias especies de plagas, que nos facilitó el CESAVEZ. En la parte de las malezas, aquí se nos presentó una situación diferente, ya que traíamos una siembra anterior de avena, por lo que estuvimos batallando mucho con esa especie para controlarla, así como con algo de coquillo, por lo que aplicamos varios productos, tales como Callisto que es un herbicida sistémico residual, selectivo para el cultivo de maíz, entre otros, los cuales sin duda nos borraron el problema que representa la presencia de hierba; de esta manera, definitivamente son este tipo de fórmulas tecnológicas, las que nos ayudan a que antes de que nos ataque por completo alguna alteración, nuestra planta ya esté protegida con los activos, dado que con el simple hecho de que controlemos a la maleza antes de que se coma los nutrientes o el fertilizante que aplicamos al suelo, desde ahí ya estamos ganando kilos, o que limpiemos de gusanos antes de que se coman las hojas, igualmente desde ese momento ya vamos ganando”.

Por su parte, con la intención de reforzar el intercambio de experiencias, el también agricultor y líder de la parcela de ensayo, el Sr. Juan Pablo Elías García agregó; “sinceramente nosotros aquí no sabíamos hacer nada de este tipo de manejos más tecnificados, siendo que ahora el sistema de riego por cintilla nos ha hecho cambiar completamente nuestra forma de trabajar, así como los diferentes maíces que metimos, satisfactoriamente para bien, y cabe indicar, que hemos logrado entender, que muchas de las veces son los pequeños detalles los que hacen la diferencia e impactan finalmente en la producción, por ello ahora atinadamente consideramos, que la precisión y la tecnificación definitivamente son el futuro de la agricultura, base para obtener más con menos desgaste de recursos”.

“Yo realmente tengo desde que nací en estas tierras, aquí nos criamos, por lo que con toda claridad podemos ver que las cosas ahora son diferentes y mejores, ya no estamos como antes, hoy si nos desempeñamos como debe de ser, gracias a cambios muy grandes que se han producido en esta región sumamente benéficos, como es principalmente la construcción y la reciente obra de conducción para llevar agua de la Presa La Tortuga hasta pie de parcelas, pasando así muchas de ellas de ser trabajadas bajo condiciones de temporal, a ser de riego, incluso algunas ya hasta de riego por goteo como es nuestro caso, esforzándonos con ello en incrementar el rendimiento y la calidad, ya que es de aquí del campo de donde dependemos como productores, de esto vivimos y esto es lo que comemos. Sinceramente hemos corrido con mucha suerte ya que no hemos batallado nada para la edificación y acondicionamiento de la presa, la cual nos ha cambiado por completo el panorama, además el conocer e implementar avanzadas tecnologías agrícolas también nos ha empujado a evolucionar tratando de estar al parejo de las constantes transformaciones que el mundo esta dando, reconociendo que tenemos mucho que aprender si queremos seguir avanzando y no quedarnos solo en lo que nuestros padres nos enseñaron, en las practicas tradicionales, sino innovar, y cada año irlo haciendo mucho mejor, porque sin duda las tierras están para dar, nada más hay que atenderlas y trabajarlas como debe de ser para que se vea que aquí también hay negocio”.

Por último, el Sr. Elías García concluyó; “estos maíces los vamos a moler como en febrero, para que se alcancen a secar bien, y primero Dios el rendimiento va ser muy bueno, yo todo el tiempo tengo bastantes animales, por lo que ya más o menos sabemos lo que consumimos de pastura, y este año yo pienso que no nos vamos a gastar ni la mitad de lo que cosechemos afortunadamente, no obstante, de estas buenas expectativas, el reto seguirá estando en ser cada día mejores productores, y no dejarle los cambios al tiempo como muchos lo hacemos, sino al contrario echarle todas las ganas y uno mismo motivarse a ir avanzando cada día, buscándole por todos lados y acercándose con los que saben, porque sinceramente anda uno con los ojos cerrados, no se imagina uno ni por donde empezar, siendo que cuando uno aprende ve las cosas fáciles de realizar, como por ejemplo lo que es el riego por goteo con cintilla, que cuando uno ni idea se da de como se maneja eso se le hace de lo más trabajoso, pero con la práctica y perdiendo el miedo vemos que es algo de lo más sencillo y sumamente eficiente, siendo que hace 3 o 4 meses no sabíamos ni como hacerle, por lo que todo es cuestión de decidirnos, yo les digo a mis compañeros aquí del rancho que cómo van a estar regando rodado sí esto del goteo es una cosa tan fácil, es poner, prenderle y vámonos a trabajar a otro lado porque esto se está regando solo, regresa uno en la tarde y le apaga, y lo único que se tiene que hacer aquí extra es estar limpiando el filtro porque como es agua de presa contiene muchas impurezas que pueden llegar a tapar la cintilla, de ahí en más es todo el trabajo que se requiere, por lo que sin duda alguna nos está haciendo más competitivos y nos está simplificando la vida, ahorrándonos tiempo, esfuerzo y hasta dinero”.

Espera la 2ª parte de este interesante reportaje, en próximas ediciones…

Salvador Juárez / El Despertar del Campo

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