El Despertar del Campo

Oro verde mexicano

Considerada la estrella del campo mexicano, el aguacatees uno de los frutos preferidos de la cocina internacional, y para dimensionar la importancia que este bien agroalimentario tiene para el país, debemos reconocer que en el mundo 1 de cada 3 aguacates son cosechados en México, además ostenta el liderato en cuanto a exportaciones se refiere siendo el cultivo que más divisas genera con cerca de los 3,030 millones de dólares, siendo así el principal productor y exportador de aguacate en el planeta; datos claros y concisos que lo han posicionado como el oro verde mexicano, base de una potente y ascendente agroindustria.

En el reciente año 2023 la producción de aguacate mexicano alcanzó un nuevo récord, logrando 2.7 millones de toneladas de dicho fruto, sobre una superficie de más de 264 mil hectáreas dedicadas a su cultivo; destacando como los principales estados productores Michoacán, Jalisco y el Estado de México. Sobresaliendo así en primer lugar Michoacán donde se producen cerca de 1.8 millones de toneladas de aguacate por año, principalmente en huertos de menos de 10 hectáreas; siendo así el aguacate michoacano el más valorado en todo el mundo, especialmente en Estados Unidos, a donde se exportan más de 1.2 millones de toneladas cada año.

En ese mismo sentido, cabe subrayar, que, dentro del estado de Michoacán, Tacámbaro es uno de los cinco principales municipios productores de aguacate, junto con Tancítaro, Uruapan, Salvador Escalante y Ario de Rosales. Por lo que este innegable liderato que ostentan actualmente en el cultivo de aguacate se puede decir que se debe a las prodigiosas condiciones climáticas y de suelo con que cuentan, así como al desarrollo de la tecnología agrícola y a un mayor entendimiento por parte del productor sobre la simbiosis generada entre las plantas y su entorno, base para un mejor cuidado y nutrición lo que sin duda potencia a su máxima expresión tanto rendimiento como calidad del fruto.

“Dentro de nuestra huerta, los arboles de aguacate más jóvenes que tenemos son de 3 años, aunque normalmente desde que los planto al año ya me comienzan a dar 4 o 5 bolitas, después al segundo año ya empiezan con más fuerza aumentando su producción de 10 a 15 kilogramos aproximadamente dependiendo del vigor y fortaleza del árbol, y ahorita en el caso de los más chicos que ya están en su tercer año, ya traen entre 30 a 40 kilos de aguacate en promedio, aunque hay algunos que llegan hasta los 100 kilos o poquito más, siendo árboles que ya tienen un poco más de cuerpo”; así lo compartió amablemente el Señor Porfirio Valencia, fruticultor con amplia experiencia en la producción de aguacate Hass, líder de la Huerta La Candelaria, destacada unidad productiva ubicada en el ejido de Santa María perteneciente al municipio de Tacámbaro, Michoacán, zona ubicada a 1,740 metros sobre el nivel del mar, suelo y clima idóneo para el cultivo de dicha variedad de aguacate.

“Para arrancar con la huerta iniciamos con un hueso de aguacate criollo, y si fuera planta criolla pura fuese mucho mejor. En el caso del injerto a la parte radicular le llamamos patrón, y las personas que se dedican a realizar el injerto de esta variedad de aguacate, primero lo embolsan y ahí mismo lo injertan, después de eso lo vuelven a reembolsar en una bolsa más grande o según como el productor lo pida, y ya que está en un tamaño adecuado es cuando lo compramos, que tenga un diámetro del tallo de más o menos una pulgada para así poder comenzar a realizar lo que es el trasplante. A partir de ahí, al año, las primeras flores y frutos pequeños que aparecen, en mi caso me gusta dejarlos, siendo que mucha gente los tumba, pero a nosotros nos ha gustado dejarlos y nos gusta fortalecer el árbol con las mejores formulas nutricionales que podemos para que no pare su crecimiento”.

“Nuestras plantaciones las tenemos bajo un diseño que le llamamos de alta densidad, con una distancia entre plantas de 4 metros x 4, lo que da un espacio óptimo para el buen desarrollo del aguacate, obteniendo un producto de alta calidad, excelente tamaño, y bastante limpieza de la fruta. Se les da ese espaciamiento para que no choquen entre ellos y que las raíces se crucen lo menos posible para que con compitan tanto por agua y nutrientes”.

“Con ese marco de plantación alcanzamos una densidad de 625 árboles de aguacate por hectárea; con esto hemos llegado a producir hasta 32.5 toneladas de aguacate por hectárea, y nuestro próximo proyecto está en lograr doblar esa cantidad de producción, lo que alcanzaríamos si cada árbol nos llegase a producir alrededor de 100 kilos de aguacate, para lo que ocupamos de un excelente manejo en cuanto a protección del árbol y nutrición para evitar que se estrese lo menos posible y así pueda expresar su máximo rendimiento. Cuando la carga del árbol es grande y la planta aun es chica, los brazos no son lo suficientemente fuertes por lo que con el peso del fruto tienden a quebrar las ramas, por lo que optamos en colocar un cierto tipo de espalderas o sostén con tubulares y rafia para que les de un mayor apoyo y no se quiebren”.

“Aquí afortunadamente contamos con agua de diferentes fuentes y tenemos tecnificada su distribución sobre la huerta, contando así con sistemas de rebombeo, filtración y mangueras de goteo para una aplicación efectiva y precisa a cada árbol; estas mangueras de goteo suministran 3.8 litros de agua por hora con 30 centímetros de distancia entre cada gotero. Colocamos una manguera a cada lado del árbol por lo que por línea de árboles tenemos doble manguera”.

“Al inicio de la plantación, en mi caso, coloco una manguera sin gotero, y al llegar a la planta le enredo unos 2 metros alrededor con micro goteros, a esto se le llama en forma de cola de cochino, con lo que aumentamos la nutrición y la humedad para que el arbolito crezca lo más rápido y fuerte posible”.

“Es muy importante dentro de la producción de aguacate, realizar una buena poda del árbol, dice uno que si no hay poda no hay producción, ya que si tenemos arboles con el follaje muy cerrado no van a producir, pero si manejamos un buen modelo de poda podemos obtener buena calidad. Como lo digo, en este tipo de árboles la poda es muy recomendable, y en una poda no existen reglas, en nuestro caso dejamos 3 o 4 brazos máximo, ya si dejamos más estaríamos hablando de la producción de leña; esta variedad de aguacate por naturaleza es muy violenta o muy precoz en cuanto al crecimiento vegetativo al igual que frutal, por lo que hay que realizar podas no muy severas pero si podas de producción, comenzando a quitar ramas que se vayan hiendo en vicio vegetativo, esas hay que cortarlas para que la huerta no suba mucho y que vaya quedando a un nivel adecuado para facilitar todo tipo de maniobras y para que quede el espacio suficiente para que el árbol completo pueda tomar el sol”.

“Además, con una buena poda vamos a evitar crear hongos o como le llamamos aquí, antracnosis, que es una enfermedad que daña gravemente al cultivo y merma rendimiento y calidad del fruto, ya que al permitir una buena entrada de luz y aire evitamos la propagación de los hongos, siendo que uno de los mejores depredadores de plagas y fungicida para hongos simple y sencillamente es el sol”.

“La poda normalmente se realiza con tijeras de forma manual; aunque nosotros con el tiempo nos hemos ido equipado con herramientas para el trabajo de mayor eficiencia y rapidez, como por ejemplo tijeras eléctricas, que dan mayor fuerza y en una hora puedo realizar hasta 3 mil cortes. Antes también se utilizaban, cierras manuales telescópicos de gasolina, pero ahora ya no, hoy ya existen eléctricas con extensión y de batería, y con ellas evitamos llenarnos de humo o de gasolina y no están tan pesadas; asimismo hay cierras manuales pequeñas de cadena y de batería que en lo personal son las que yo uso por su rapidez y practicidad, con lo que aventajamos con mayor facilidad el trabajo a comparación de antes”.

“Yo recomiendo formar árboles de máximo 5 metros de altura, por 4 o 4.5 metros de diámetro, para que como lo he dicho no se crucen las ramas, que lleguen casi a toparse, pero que no se cierren las calles por completo, y al dejar más frondoso el árbol también aumenta la producción. El árbol puede decirse que tiene 5 caras para producir, 2 x 2 alrededor y la parte superior. Por ello cuando se tiene un árbol tapado o cruzado con otro, su porcentaje de producción disminuye hasta solo un 20%, porque a los lados ya no produce, solo empieza a producir en lo que es la copa o mejor dicho en la parte de arriba, por ello lo recomendable es no dejarlos crecer tanto y mantenerlos a una buena altura”.

“Dependiendo de la altura a nivel del mar a la que se encuentre la huerta es el tipo de floración que tiene el aguacate, este florea cuatro veces de forma natural al año, de esas según la zona en la que estemos producimos lo que más nos conviene; por ejemplo, a 1800 metros sobre el nivel del mar que es mi caso en Huerta La Candelaria, la floración que más me conviene es la que llamamos como la flor loca, que se nombra así porque comienza a salir en tiempo de lluvias y casi no amarra ni se logra, una que otra es la que se da, por eso es que decimos que esa está loca. Cabe precisar que hay 4 floraciones en el ciclo, precisamente la loca, aventajada, normal y marceña”.

“En el caso de cuando la huerta está ubicada a 2 mil metros de altura sobre el nivel del mar o poco más, donde hay mayor humedad y no se ocupa el riego, ahí lo que les conviene producir es el aguacate llamado marceño, que proviene precisamente de el tipo de flor marceña que se da entre marzo y junio, siendo que es el tipo de aguacate que más resiste a ese tipo de zonas, aunque en realidad están más expuestos a fenómenos climatológicos adversos como granizadas o heladas”.

“Más o menos empezamos a cosechar a mediados de agosto, ya que este bien rendido el aguacate, que tenga los suficientes aceites, azucares y almidones. Y aquí ahora si que la forma de venta del producto es como el productor lo decida, y hay diferentes precios conforme a calidad y tamaño, aunque en realidad los precios se manejan por medio de gramaje, de 120 gramos y otros usan el sistema de pela palo, que ahí es cuando se llevan toda la fruta pareja ya sea chica o grande. Por ejemplo, fruta de 120 gramos la pagan en 35 o 40 pesos, y si se vende de 220 gramos en adelante, el kilo anda en 52 pesos del árbol, y ahí uno como productor ya no hace nada, el comprador llega y se encarga de todo el proceso de corte. Existen empaques que tienen sus propios huertos o ranchos muy grandes de aguacate, donde son tanto productores como comerciantes al mismo tiempo, pero nosotros aun no estamos a ese nivel, donde necesitaríamos grandes inversiones para la adquisición de maquinaria para empaque, para etiquetas, transporte y demás conceptos necesarios para hacer llegar el producto hasta el consumidor final, además de que la superficie de nuestra Huerta La Candelaria es de 7 hectáreas lo que no es suficiente para llegar a tales niveles de producción, por lo que solo me dedico a producir y a vender la fruta del árbol”.

Para finalizar, el Sr. Señor Porfirio Valencia agregó; “antes existían otros cultivos, mi papa tenia ganado de vacas lecheras y sembrábamos allá con él lo que era sorgo, ajonjolí y maíz, y en el año de 1992 compré el terreno en esta zona y comencé a dedicarme al cultivo del aguacate, aunque hay que recordar que en esos tiempos casi no tenia valor, su precio en aquellos años andaba alrededor de los 35 centavos el kilo, no había aun el liderazgo que hoy se tiene para exportar al mercado de los Estados Unidos que sin duda alguna es el mejor de los mercados. Este y en general el aguacate michoacano es enviado al país vecino del norte tanto por su cercanía, así como porque el valor del producto es el más conveniente para todos, tanto para el productor como para el distribuidor, comercializador y demás eslabones involucrados en esta cadena productiva, y la verdad es que nuestro estado es la capital mundial del aguacate, donde se da la mayor calidad de este valioso fruto”.

Espera la 2ª parte de este interesante reportaje productivo, en próximas ediciones…

Salvador Juárez / El Despertar del Campo