Ganadería con noble propósito
Entre montañas y llanuras se vislumbran las privilegiadas tierras del municipio de Tepechitlán, mismo que se localiza en la parte Sur del Estado de Zacatecas, en las estribaciones de la Sierra Madre Occidental, entre la Sierra de Morones al este, y la Sierra de Atolinga al oeste, formando así parte de lo que se conoce regionalmente como el Cañón de Tlaltenango; bello y fecundo escenario en el que se pueden distinguir valles regados por la presa Miguel Alemán ubicada en la comunidad de Excamé, y la presa Morelos próxima a la localidad de la Boquilla.
Su geografía con una altitud promedio de 1700 metros sobre el nivel del mar propicia un clima que va de templado subhúmedo a semicalido subhúmedo, con lluvias en verano, una temperatura media anual de entre los 14° y los 20° centígrados, con máximas de 32° centígrados en el mes de mayo, y mínimas de -3° centígrados en los meses de diciembre a enero, su precipitación pluvial varia de los 700 a los 1000 milímetros anuales; condiciones típicas que son favorables para un desarrollo económico basado en actividades del sector primario, entre las que destaca la ganadería principalmente con la producción extensiva de bovinos, labor de la que sobresalen los criadores de razas puras de registro, tales como la reconocida Ganadería La Cabaña de la familia Luna Gutiérrez, enfocada al desarrollo de ganado Simmental de alta calidad genética productiva.
“Nuestro desempeño se ha ido perfeccionando en la crianza de la raza Simmental desde hace décadas, preocupados siempre por buscar y alcanzar la mejor genética, trabajando a través de eficientes esquemas de inseminación artificial con material traído desde Canadá, en base a la selección de los mejores toros con altos índices productivos heredables en leche y carne”; así lo precisó Salvador Luna Gutiérrez, sucesor de generaciones dedicadas al campo, líder y representante de la Ganadería La Cabaña, de Tepechitlán, Zacatecas.
“Esta Ganadería comenzó con pura transferencia de embriones, hoy aun contamos con embriones, posteriormente se fueron seleccionando los mejores ejemplares de inseminación artificial, y actualmente estamos lavando de nueva cuenta, por lo que tenemos embriones a la venta y semen de gran clase.”
“El origen de esta raza se encuentra en el Valle de Simme ubicado en Berner Oberland, Suiza, de donde se deriva su nombre, Simmental; paulatinamente se fue introduciendo en Alemania de donde posteriormente se distribuyó al resto del mundo. En sus inicios, la explotación de este ganado tuvo un triple propósito, ya que además fue utilizado como animal de carga o de tiro para los trabajos cotidianos”.
“Hoy en día, las características principales de este tipo de ganado, es el doble propósito, dado que son animales con gran habilidad para producir leche y carne, destetando crías muy pesadas que cuentan con un gran desarrollo muscular; asimismo sobresalen por su fertilidad y precocidad en virtud de que alcanzan su pubertad a muy temprana edad, poseen una gran capacidad de adaptación, de gran longevidad y docilidad”.
Para finalizar, el ganadero Luna Gutiérrez agregó; “el sistema productivo que implementamos es una combinación entre el manejo en potrero y el encierro en corral para suplementar, por lo que del momento en que la vaca pare a su cría hasta que se desteta, son alrededor de 6 meses lo que los animales están libres en el agostadero, una vez destetado el becerro pasa al corral donde se le empieza a dar una alimentación rica en granos bien balanceada, con el fin de irlos preparando para su comercialización como semental, lo cual por lo general se realiza con una edad de 14 meses en adelante hasta los 36, que es el periodo óptimo donde el toro puede empadrar”.
Sus excelentes propiedades, hacen del ganado Simmental uno de los más funcionales y productivos, por lo que el futuro de esta raza en el país es promisorio.