Revolucionando paradigmas 3ª parte

También nos mandaron a una provincia al sur de China, una región tan fría que sembraban maíz en acolchado siendo esa la única forma de producir, y aquí en México nos quejamos del clima, por eso Dios nos va a castigar, por andar de llorones, ya que en aquellas partes del mundo hay sitios donde 160 días del año están bajo cero, teniendo una temperatura media anual de 6° centígrados bajo cero, y 2 meses del año llegan hasta los 25° centígrados bajo cero, teniendo así solamente 150 días al año con temperaturas un poco arriba de los 0° centígrados, y solo 135 días por arriba de los 5° centígrados, y en ese periodo hay que producir, no hay de otra, es una completa locura, ya que las ventanas de siembra son de 10 días y en ese lapso se llegan a sembrar en esa franja maicera como unas 34 o 35 millones de hectáreas, y tiene uno que sembrar antes del 10 de mayo porque el 5 de septiembre cae la primera helada de 5° centígrados bajo cero y si el maíz no alcanza a llegar a madurez fisiológica simplemente no se cosecha nada”; así lo compartió el Ing. Ernesto Cruz experto en la producción de maíz poseedor de varios récords internacionales, líder de Atider.

“Llega la primera helada y tiene uno que cosechar con 28 a 30% de humedad porque sino empieza a nevar, y andar trillando entre la nieve es un desastre; esa es la única forma de producir en China, y se tiene que hacer a como dé lugar porque no hay de otra para obtener comida. De ahí, también nos llevaron a la provincia de Shanxi situada en una meseta del norte de China, e igualmente con el reto de incrementar la producción; cada año me llevaba 5 o 6 técnicos de Atider en México para que me ayudaran”.

“En el 2018 me dieron el premio nacional a la innovación tecnológica en China, siendo así el primer científico extranjero con ese nivel. El ministro de agricultura chino me dio el reconocimiento y me dijo: ahora sí ya te conocemos, y ya te vimos que nos has llevado paso a pasito, pero te voy a pedir un favor, necesitamos dar un brinco fuerte, ocupamos que este año nos muestres ahora sí un rendimiento alto, queremos que pases de las 26 o 27 toneladas de maíz por hectárea. Le conteste que no había problema, que lo único, es que se iba a necesitar tecnología, a lo que me respondió que adelante con lo que se ocupara, y eso es lo que le agradezco a los chinos que me dieron grandes facilidades, me decían, vete a la feria de Hanover, de Génova, de Chicago, y la tecnología que veas y que sea de utilidad, lo que valga, cómprala y tráetela, por ello tuvimos la oportunidad de conocer y aplicar lo último de tecnología en el mundo, estrenábamos tractores de 650 caballos”.

“De esa forma me anime a aceptar ese reto, además de que en el 2012 nos pasó algo que veíamos bastante interesante y con gran potencial; el echo es de que andábamos sembrando en el desierto, y traíamos sembradoras Gaspardo de machete, no de disco, y hay que reconocer que si hay buenos operadores chinos, pero la mayoría son bien malos para trabajar, bajo ese escenario empezó a llover y junte a todos los tractoristas para darles algunas indicaciones diciéndoles que tenían que bajar la sembradora como si fueran a aterrizar un avión, para que no se tapara, afortunadamente la mayoría hizo caso, pero como 3 no, dejándola caer de golpe por lo que se tapaban los machetes, llegaban a la cabecera y levantaban la sembradora y salía el montón de semilla de maíz, lo primero que hice al ver eso fue bajar al tractorista a que juntara la semilla, pero se empezaron a retrasar las siembras, y finalmente decidí que así dejaran esos manchones, aunque después recordé que cuando llegara el patrón me iba a regañar, por lo que tape el montón de semillas con tierra y agarre un puño de fertilizante de la sembradora y se lo eche, y así germinaron todas amontonadas las plantas. Cuando mi patrón vio aquello lo primero que hizo fue preguntarme que eso que era, y yo para zafarme de bote pronto le dije que era una prueba, total que así quedo como si fuese una prueba, pero mi sorpresa vino cuando al abrir las plantas en V3 vi que todas ya traían mazorcas, por lo que me puse a darles a lo que me pedían, y todas dieron, mazorcas de más de 200 gramos, es ahí donde nació el concepto de la hiperdensidad que ahora manejamos, ya que analizando dije, y si estos manchones me los llevo a una hectárea, serían como 300, 350 o 400 mil plantas, y al calcular las toneladas estábamos hablando de 45 o 50 toneladas de maíz por hectárea, una locura, pero por lo general de ahí es de donde han surgido los grandes cambios que han transformado al mundo, y dijimos porque no hacerlo empezando así con el perfeccionamiento de ese sistema”.

Espera la 4ª parte de este interesante reportaje, en próximas ediciones…

“El concepto de la hiperdensidad surge a raíz de un error afortunado que tuvimos en la siembra de maíz en China, quedando manchones de semilla amontonada al taparse la sembradora, y sencillamente de esa falla fue de donde nació la idea de extrapolar esa alta densidad de plantas a una hectárea, poniéndonos retos locos, pero que a la fecha han funcionado”.