Trazando la ruta de evolución

Fortalecer conceptos que proyecten practicas agronómicas adecuadas para el cuidado de suelo y agua, como herramienta útil para crear un sector sustentable, es el propósito bajo el cual se estableció el módulo demostrativo en campo con cultivos forrajeros manejados bajo el sistema de agricultura de conservación en la modalidad de riego, tales como girasol, maíz, alfalfa, y triticale, esto dentro de las instalaciones del Rancho DAZJO (Desarrollo Agropecuario Zacatecas La Joya), unidad de producción agropecuaria asentada en tierras pertenecientes a la localidad de Cieneguillas, del municipio de Zacatecas, enfocado en la reproducción de ovinos para la obtención y comercialización de carne de alta calidad, el cual además se configuró como uno de los principales escenarios del pasado Seminario de Agricultura Sostenible, plataforma de interacción virtual y presencial impulsada por un conglomerado de instituciones como la SADER, el Gobierno del Estado de Zacatecas, la UAZ, UACh, el CIMMYT, Grupo Modelo y su estrategia Aguas Firmes, la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ), el INIFAP, y Grupo Agrocime, entre otras.

“Los costos de producción de los cultivos intensivos que anteriormente manejábamos eran muy altos, e igualmente iba cada día en aumento la degradación de nuestros recursos naturales, por ello la opción a la que hace 8 años le apostamos para tratar de mejorar, fue reconvertirnos a la agricultura de conservación, con ayuda de técnicos certificados por el CIMMYT, es así que hoy afortunadamente el panorama nos ha cambiado para bien completamente, ya que algo esencial es que hemos logrado recuperar la fertilidad de nuestros suelos, siendo que en el primer análisis que realizamos teníamos solo el 0.5% de materia orgánica, y actualmente, en los últimos estudios efectuados nos marca un rango del 2.5 al 3% de materia orgánica, con densidades aparentes de 0.98 a 1, y una capacidad de almacenamiento de agua exagerada, entre otros gratos indicadores, que se reflejan en el abatimiento de nuestros costos productivos, por ejemplo, en el caso de combustibles, desgaste de maquinaria y horas de trabajo, el ahorro es mínimamente de un 50% en comparación al esquema que previamente manejábamos, por lo que ahora puedo decir firmemente, sin temor a equivocarme, que la agricultura de conservación es la ruta de desarrollo sustentable que Zacatecas requiere”; así lo relató el Ing. José María Llamas Caballero, agricultor y ganadero, líder de Rancho DAZJO.

“Este sistema de conservación nos invita a mover lo menos posible el suelo, por lo que aquí tenemos tablas, en las que este sería el octavo año, sin mover absolutamente ni el sistema de riego ni el terreno, con excelentes resultados, bajo la premisa de que, mejorando el suelo, mejoramos la producción, y el panorama evoluciona, pretendiendo así ser un modelo a seguir para quienes deseen ser más amigables con el ambiente”.

“Aquí buscamos producir el forraje de la más alta calidad posible, tratando con ello de deslindarnos de la compra de insumos, logrando ser autosuficientes en más del 90% de la dieta del ganado, y producir una carne sana, completamente inocua, libre de antibióticos y anabólicos, con animales que están consumiendo girasol con aceites altos oleicos, alfalfas y maíces de excelente calidad, cumpliendo así con los requerimientos nutritivos que nos permitan alcanzar los parámetros productivos y reproductivos que el ganado potencialmente puede expresar”.

Para finalizar, el Ing. Llamas Caballero agregó; “si analizamos, lógicamente podemos entender que la capacidad genética de nuestros vegetales tiene miles de millones de años de adaptación, ya que incluso desde mucho antes que el hombre aprendiera a cultivar las plantas, la misma naturaleza se encargaba de cuidarlas y conservarlas, por lo que cuando entramos a estos conceptos, en realidad tenemos que hacer un cambio de filosofía, reconociendo que es mínimo lo que sabemos y mucho lo que tenemos que aprender, y entre más entendamos las raíces del negocio agropecuario, más vamos a estar de acuerdo con la agricultura de conservación, a través de la cual, a grandes rasgos, podemos contribuir a la preservación de nuestros acuíferos dado que cosechamos agua infiltrándose el 100% de la que cae sobre el suelo, facilitándole así el trabajo a la naturaleza”.

Asimismo, con la intención de reforzar el intercambio de experiencias, el Ing. Julio Cesar González Márquez, representante técnico del Proyecto Aguas Firmes de Grupo Modelo y, asesor de Rancho DAZJO, añadió; “dentro de esta unidad productiva, en términos generales podemos ver algunas temáticas relacionadas con el sistema de agricultura de conservación, como lo son siembras directas, lo que implica el mínimo movimiento del suelo, con intersiembras de triticale sobre alfalfa, y maíz sobre una alfalfa de aproximadamente siete años de edad, donde el cereal se establece sin ningún problema de compactación y se ve de muy buen porte, también maíz sobre triticale, manejando así la rotación de cultivos y la cobertura de residuos sobre la superficie, todo esto bajo un esquema de fertilización integral basado en un previo análisis de suelo, nivelación de parcelas, además de la aplicación de microbiología a través de insectos benéficos que ayudan a combatir plagas y enfermedades, así como el uso de trampas alimenticias o de feromonas para el monitoreo y control de ciertos organismos patógenos, y el aprovechamiento de nutrientes reciclados mediante la incorporación de excretas vía composta al campo, entre otras prácticas que se están implementando en Rancho DAZJO para una producción más sustentable”.

Innovador espacio productivo que fomenta y fortalece la transformación ideológica que busca regresar al suelo su fertilidad natural.

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