Innovación en el agro

Douglass North, en uno de sus ensayos más respetados, explicó que el mundo no ha sufrido las hambrunas que predijo Thomas Malthus porque, cada vez que se ocupaban todas las mejores tierras disponibles, había un avance técnico que hacía más eficientes a los terrenos de menor calidad. La amenaza del crecimiento geométrico de la población contra el crecimiento aritmético de los alimentos ha sido vencida una y otra vez gracias a la tecnología.

Y, si la técnica resolvió este problema durante mil años en Europa, actualmente los cultivos se benefician de semillas resistentes a plagas, nutrientes que rehabilitan tierras agotadas y tratamientos que garantizan cosechas más abundantes que nunca. Además, las tecnologías de procesamiento nos permiten visualizar un futuro cercano con alimentos deshidratados que no requerirán refrigeración alguna para conservarse, plantas más resilientes para cultivos más productivos y alimentos que no solo no provoquen obesidad o enfermedades, sino que coadyuven a la curación de padecimientos crónicos.

Estos esfuerzos no solo se dan en el sector privado, sino que existen iniciativas de Naciones Unidas, como el Centro Conjunto FAO/OIEA de Técnicas Nucleares en la Alimentación y la Agricultura, que ayudan a resolver problemas concretos de producción agrícola en todo el mundo.

México debe hacer su tarea en estos temas y de manera particular impulsar la innovación, ciencia y desarrollo tecnológico y en particular la generación de patentes. Jalisco ha realizado su labor y por medio de su estrategia para impulsar la propiedad intelectual – en la cual se incluye la convocatoria PROPIN entre otras- se han apoyado tecnologías realizadas en nuestra entidad; por ejemplo, un sistema y método para medir la fertilidad del suelo y la calidad del agua, nutrientes orgánicos para uso agrícola, métodos para elaborar fertilizantes, dispositivos para el arado, también tecnologías vinculadas a la economía circular etc.

Jalisco además de apoyar la protección de la tecnología ha impulsado acciones para buscar su transferencia y comercialización por medio de la iniciativa “De la Ciencia al Mercado” como lo son; bioplástico de nopal, nanotecnología para recubrimiento de alimentos y sustituto de materiales compuestos de fibras vegetales entre otros, con las cuales se apuesta por el emprendimiento de base científica tecnológica basada en patentes e invenciones Jaliscienses o bien su licenciamiento, muy relevante si tomamos en cuenta que Jalisco en 2021 aportó el 20% de las patentes nacionales en México. De los apoyos para protección de patentes e invenciones que se brindaron en Jalisco durante 2021 poco más del 18% están vinculados a la agroindustria, lo anterior demuestra que la generación de políticas públicas locales es fundamental para lograr cambios nacionales.

En suma, la explicación de Douglass North sigue vigente: la agrotecnología es el camino más pertinente y efectivo para garantizar una producción alimentaria suficiente y eficiente. Corresponden a los países y organismos internacionales lograr una mejor distribución alimentaria, pero, para lograr este objetivo, primero se debe seguir produciendo en cantidades suficientes, exponenciales, algo que se logra todos los días, gracias a los esfuerzos permanentes de mejora tecnológica, investigación y desarrollo.  

Larisa Cruz Ornelas, es actualmente directora general de Ciencia y Desarrollo Tecnológico en la SICyT con 16 años de experiencia en el servicio público en política pública para impulsar la propiedad intelectual, ciencia y desarrollo tecnológico- Twiter @LarisaCruzMX

La agrotecnología es el camino más pertinente y efectivo para garantizar una producción alimentaria suficiente y eficiente.

Larisa Cruz Ornelas

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