Raíz con sabor 3ª parte
“La fertilización en la zanahoria depende de la densidad de población que tengamos en una hectárea, nosotros manejamos una separación de 1 metro de centro a centro del surco, pero hay diferentes métodos, hay quienes lo implementan más cerrado desde 82 centímetros, 87 y 92 centímetros, pero en nuestro caso optamos por ampliarnos un poco dado que hemos observado mejores resultados, ya que creemos que entra más oxigeno y se desarrolla mejor, con un follaje bastante fuerte y de buen color, aparte de que no maltratamos tanto el producto”; así lo señaló Adolfo de Lira, agricultor, quien en el reciente ciclo sembró y cosechó una importante superficie con el cultivo de zanahoria, parte de ella establecida en la parcela de producción agrícola conocida como La Secadora, ubicada en suelos pertenecientes a la localidad de El Lampotal en el municipio de Vetagrande, donde se manejaron diferentes y novedosas variedades como Natuna, Narita y Allyance.
“Nosotros estamos metiendo densidades de siembra de 1.4 a 1.7 millones de semillas por hectárea, con una merma en germinación del 10%, por lo que nos vienen quedando alrededor de 1.5 millones de plantas, y con esa cantidad no se ocupa de tanto fertilizante en crecimiento, ya que la zanahoria tiene el espacio para crecer más, sin embargo, si tenemos mucha densidad y están muy juntas será más difícil su crecimiento; es así que entre menos densidad tengamos podemos sacar más tamaño, pero eso ya depende de que tipo de zanahoria es la que estemos buscando producir, ya que algunas veces los tamaños medianos adquieren un mayor valor comercial pero en otras ocasiones a las que le llamamos leña, que son las más grandes, traen mejores precios pero también hay ciclos en que no valen, por lo que esto es muy variable, cambiando de un día a otro dependiendo de la oferta y la demanda existente”.
“Producir zanahoria en la actualidad se ha convertido de una actividad altamente costosa, como todo en la agricultura hoy en día. Nosotros más o menos traemos unos costos de producción por hectárea de 56 mil 800 pesos, desglosados en preparación de suelo 6 mil pesos, cintilla 12 mil 800, 18 mil pesos de semilla, de fertilizante 9 mil pesos, 2 mil pesos de herbicidas, y otros 9 mil pesos de lo que es la fertirrigación, esto a grandes rasgos contando las labores e insumos principales”.
Por último, el Señor Adolfo de Lira agregó; “para cosechar la zanahoria, lo primero de lo que nos encargamos es de aflojarla con una cuchilla de aproximadamente 2 metros de longitud, la cual se la pegamos al subsuelo, que se entierra y de esa forma va sacando el producto desde las raíces, teniendo la mayor precaución posible para no lastimarlas, de ahí metemos gente que se encarga de ir extrayendo la zanahoria de forma manual, tomándolas del follaje y dándoles un pequeño estirón y una leve sacudida, colocándolas posteriormente dentro de un costal, el cual se subirá al camión que las llevará a la lavadora, donde le dan un proceso de lavado y pulido y se van clasificando por tamaños, que de grandes a chicas son leñas, medianas y polvos, para de esa forma ser trasladadas finalmente hasta su mercado de consumo que puede ser Guadalajara, Monterrey, Ciudad de México, Aguascalientes, entre otros.
Espera la 4ª y última parte de este reportaje, en próximas ediciones…