Manejo de injertos en hortalizas 2ª parte
Algunos de los factores que mas influyen en la unión del injerto son los siguientes:
Temperatura: Tiene un marcado efecto sobre la formación de tejido de callo. En el injerto de cucurbitáceas se recomienda mantener una temperatura de 25 a 26 °C durante la fase de unión de injerto. La temperatura mínima para que no haya afectaciones es de 15 °C y una máxima de 30-32 °C.
Humedad: Los tejidos cortados de la unión del injerto deben mantenerse, por algún medio, en condiciones de humedad elevada, pues en caso contrario las posibilidades de una buena cicatrización son reducidas.
Superficie de contacto: Si se pone en contacto solo una pequeña porción de las regiones cambiales del patrón y de la variedad, la unión será deficiente. Aunque haya una buena cicatrización y comience el crecimiento de la variedad, cuando esta alcance un desarrollo importante, una unión tan escasa impedirá el movimiento suficiente del agua y se producirá el colapso de la planta injertada.
Contaminación con patógenos: En ocasiones entran, en las heridas producidas al injertar, bacterias u hongos que causan la pérdida del injerto. El prevenir estas infecciones, agua y manos limpias, es fundamental.
Condiciones ambientales en la fase posterior al injerto: Es necesario asegurar, durante la fase posterior al injerto, que no lleguen a marchitarse ni el patrón ni la variedad. El marchitamiento de la variedad se produce con extrema facilidad en el caso de injerto de púa o empalme. A la vez debe mantenerse una buena temperatura para que se produzca la soldadura del injerto y alta humedad relativa.
Instalaciones necesarias para la producción de plántulas
Cámara de germinación: Esta área dispone de aporte de calor y sistema de refrigeración para mantener la temperatura según las especies, de 20° a 30°. Debe disponer también de humidificación para mantener la humedad relativa alta.
Máquina de siembra: Esta herramienta realiza operaciones como; la mezcla de sustratos, alimentador de bandejas y dosificador de sustratos, para posteriormente rellenar a las bandejas, cuenta también con un túnel de riego en donde las bandejas son humedecidas, y finalmente se realiza la siembra. Aunque todas estas labores pueden realizarse también de manera manual, sin duda es una herramienta que ahorra mucho trabajo y mano de obra.
Invernadero de cría de plantas: Una vez realizada la germinación del patrón o la variedad se llevan al invernadero hasta el momento de injerto. Después del injerto de las plantas vuelven al invernadero hasta el momento de la plantación. El invernadero normalmente es de tipo capilla o multitúnel. Las ventilaciones laterales deben contar con una malla para evitar el acceso de insectos transmisores de virosis. Debe haber mesas o soportes para mantener las bandejas separadas del suelo.
Cámaras para la fase postinjerto: Con el fin de mantener las condiciones adecuadas en este periodo (temperatura de 20°C y alta HR), en el interior del invernadero se construyen cámaras con una cubierta de plástico adicional y, preferiblemente, con sombreo opcional.
Calefacción: Durante todo el periodo de cría de plantas y especialmente en la fase de postinjerto es conveniente asegurar que la temperatura no baje a ciertos límites. Se pueden utilizar generadores de aire caliente o por medio de tuberías con flujo de agua caliente.
Humidificación: Puede conseguirse con algunos de los siguientes sistemas: Fog, Cooling system, Microaspersión bajo de las banquetas o riego en los pasillos.
Taller de injerto: Es un área destinada para la realización de injertos, el lugar debe estar sombreado, sin corrientes de aire, bien iluminado y donde la temperatura se mantenga en unos niveles agradables para los operarios. Esta área debe estar equipada con asientos (para dar comodidad del operador) y con mesas suficientes para colocar las bandejas de injertos y variedades.