Inmunoglobulinas de la yema 3ª parte
“La aplicación de este sistema de protección animal, la verdad es que es muy fácil y cualquier productor lo podría aprovechar, puesto que la pollita al día de edad viene con el saco vitelino, el cual trae la cantidad suficiente de IgY, como lo es 22.5 gramos por mililitro que es lo que trae de concentración la yema, y la dosis son 2 kilos de IgY por cada tonelada de alimento, por ejemplo, a las pollitas de día de edad les aplicó lo de 2 toneladas de inmunoglobulina durante las primeras 4 semanas, que ciertamente está muy por arriba del parámetro que debiera de ser por el consumo de alimento de mi pollita, sin embargo no pasa nada, y no necesito aislarlas y se lo doy al día de edad, con eso lo que estamos haciendo es que potencializamos los anticuerpos que trae el animal de su madre al reproducirse. Pasando las 4 semanas dejo de darles la IgY, y llegándose las dieciséis semanas se las vuelvo a dar, con lo que las estamos preparando para romper postura, que para ese entonces ya le aplique en la granja de crianza alrededor de 30 antígenos para proteger a como dé lugar todo tipo de influenza presente en el campo, esto con ayuda de las vacunas, suministrando la IgY para de esa forma hacer sinergia con las vacunas que estemos metiendo en el campo, y ya con eso se van mis animales; ya si ocurriera algún brote de cualquier tipo, que es poco probable, volvemos aplicar el tratamiento durante 3 semanas más hasta sacar el problema por completo”; así lo señaló el MVZ Rodolfo Ramón Murillo, profesor de la Unidad Académica de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Zacatecas y asesor avícola independiente, experto en este tipo de inmunoglobulinas (IgY) que producen las gallinas para proteger a sus pollos durante las primeras semanas de vida de los patógenos que se presentan.
“Como dice el dicho, siempre hay que platicar con el que sabe y apostar con el que tiene, y nosotros como médicos tenemos que capacitar a las personas para que apliquen las vacunas, siendo la verdad que tenemos muchos problemas en el campo por el hecho de que no se guarda la cadena de frío en el uso de los antígenos, y eso nos repercute mucho en la respuesta que podamos tener de nuestros animales a los antígenos, por ejemplo, la viruela, donde la mayoría de nuestros de galleros no saben aplicar la vacuna de viruela y tampoco guardan la cadena fría, es por eso que les digo que se acerquen a nosotros para asesorarlos de cómo usar el sistema, lo de la IgY, porque nosotros estamos en pro de la avicultura y no en contra, y mucho menos en contra de la economía del país”.
“Por último, algo que me gustaría agregar, es que dejemos en paz la fauna silvestre, pensando que son las aves migratorias las que nos dejan las enfermedades, siendo que esos son problemas que se presentan porque tenemos sumamente estresados a los animales destinados tanto a la producción de huevo como a los de carne, viendo que por ejemplo los animales migratorios nunca se van a enfermar, por lo que no tenemos que hacerles la guerra, sino al contrario; en mi caso me gusta mucho la fauna silvestre porque me trae problemas que hay en otras partes, y así luego mis animales que tengo en el laboratorio crean anticuerpos contra esos nuevos virus que llegan al campo, me los llevo en la yema y después lo único que hago es dársela a mis animales donde ya va la inmunoglobulina con la nueva enfermedad que encontraron las gallinas en el campo. Le lleva ocho días para accionar a un nuevo antígeno y alrededor de quince días más para generar anticuerpos contra ese antígeno al que yo la haya expuesto”.
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