Fructífera alternativa para la rotación de cultivos
Marcar el trayecto de evolución para un campo moderno y competitivo, mediante el desarrollo de una favorable diversificación productiva vinculada con el acceso a nuevos mercados, es el concepto principal en base al cual se estableció la interesante parcela de innovación del cultivo de girasol, iniciativa creada gracias al dinamismo que imprime Grupo Agrocime en coordinación con la compañía semillera Nuseed, entre otros eslabones de la cadena o figuras de cambio, quienes en un esfuerzo conjunto han logrado ir articulando una robusta e importante red de valor la cual posiciona a dicha oleaginosa como una preciada alternativa para el productor.
Módulo demostrativo implantado en terrenos próximos a la localidad de Francisco E. García (Los Rancheros), del municipio de Guadalupe, Zacatecas, dentro de parcelas de producción comercial del Sr. Antonio Ortiz Becerra, sitio en el que se fijaron notables planteamientos por medio de temas como las densidades de población, fechas de siembra, manejo de suelo y agua, nutrición vegetal, controles sanitarios, cosecha y comercialización, además de la valoración de 6 híbridos, esto entre otros componentes a validación, lo que sin duda alguna abona a un mayor entendimiento del cultivo de girasol y el entorno ambiental, social y económico que lo rodea.
“La producción de girasol, no trata de desplazar a ningún otro cultivo, más bien representa una opción para una conveniente sinergia que permita dar una apropiada rotación a nuestras tierras y pueda llegar a garantizar una importante fuente de recursos mediante una mayor certidumbre en la comercialización del producto, siempre y cuando cuidemos bien de cada uno de los puntos críticos que pudiesen llegar a representar una amenaza para ésta cadena productiva”; así lo determinó la Ing. Beatriz Adriana Martínez, técnico auxiliar del área agrícola de Grupo Agrocime.
“La vitrina de materiales sembrados en esta parcela demostrativa con fines tanto comerciales como de validación o investigación, consta de 6 híbridos de girasol, desde el más precoz hasta el más tardío, de los de período más corto tenemos a Cobalt y a Daytona, por otra parte los de ciclo intermedio son variedades que aún no se han liberado que apenas están siendo probadas como el N4H4M411 y el N4HM354, y finalmente dentro del segmento de tardíos o de ciclo largo, más enfocado para la parte de riego, contamos con el nuevo N4HP470 el cual está siendo prácticamente comparado con el conocido girasol Sierra, todo ello con el fin de valorar y determinar con precisión cuales híbridos son los que mejor funcionan en esta región definiendo aspectos como rendimiento y mayor desarrollo fenológico, entre otros componentes”.
Por su parte, y con la intención de reforzar la presentación, Sr. Antonio Ortiz Becerra añadió; “en términos generales, definitivamente la agricultura en su apartado productivo ha ido poco a poco mejorando, donde no es tan claro el avance es en la situación de la rentabilidad, ya que los costos de producción cada día son más altos y el precio de nuestros productos es muy inestable, no obstante, el cultivo de girasol nos ha dado una opción para un buen equilibrio comercial y mayores beneficios en la cuestión de mejoramiento de suelos, por lo que paulatinamente, a través de 4 años que llevamos sembrando dicha oleaginosa, hemos ido incrementado su superficie, empezamos con 3 hectáreas, después 8, el tercer año aumentamos a 50, y hoy en este ciclo sembramos cerca de 60 hectáreas de girasol”.
Con una extensa y creciente demanda, así como un sobresaliente potencial en superficie y capacidades tecnológicas de producción, el cultivo de girasol, hoy definitivamente representa un negocio rentable, competitivo y sustentable para el productor.