Revolucionando paradigmas 4ª parte

“El concepto de la hiperdensidad surge a raíz de un error afortunado que tuvimos en la siembra de maíz en China, quedando manchones de semilla amontonada al taparse la sembradora, y sencillamente de esa falla fue de donde nació la idea de extrapolar esa alta densidad de plantas a una hectárea, poniéndonos retos locos, pero que a la fecha han funcionado”; así lo señaló el Ing. Ernesto Cruz experto en la producción de maíz poseedor de varios récords internacionales, líder de Atider.

“Entonces todos me decían que las plantas de maíz no producen así de amontonadas, pero haciendo algunas consideraciones, vimos que el Teocintle, pariente silvestre del maíz antecesor directo del cual se domesticó el cultivo, crece muy junto como si fuese un tipo de zacate johnson; el genoma del maíz es sumamente complejo, por ejemplo, el humano tiene el mayor número de genes que cualquier otra especie animal en el planeta, pero nada más 4% mayor cantidad de genes que las moscas y dos milésimas más que el mono, pues resulta que el maíz posee 6 veces más genes que el ser humano, lo que señala el gran nivel de evolución que tiene esta planta, más todo el mejoramiento genético que se ha hecho, aun y con ello todavía mantiene esos genes primitivos que le permiten crecer así de amontonada, aún tiene esa capacidad”.

“La otra consideración, es de que ahora lo que todos tenemos en mente como paradigma, o lo que todos andamos buscando son mazorcas muy grandes, de 200 gramos, 220, 230 y hasta 240 gramos, y la genética para haya va, poco a poco ha ido avanzando entorno a obtener cada vez mazorcas más pesadas, el asunto es que para que una planta acumule 240 gramos de materia seca en 40 días que es cuando se hace la mazorca, se necesita una genética muy superior, y el problema con esos genes ya en producción, es que no son nada compatibles con la rusticidad del maíz, por ello la mayoría de los maíces actuales de alta productividad, son muy enfermizos y son bien difíciles de adaptar, esa es una limitante, pero hay va, la genética actual poco a poco ha estado subiendo el peso del grano, y la población, sembrábamos 80 mil, luego 85 mil, después 90 mil, y ahora ya andamos por las 100 mil plantas por hectárea, y hay va paso a paso, y todo el mundo esta en ese trayecto con ese paradigma; pero qué tal si tomamos otro camino, que es lo que nosotros proponemos, que tal si manejamos mazorcas de 140 o 150 gramos, pero unas 200 o 300 mil mazorcas de esas, recordando que es un concurso de toneladas por hectárea no de tamaños de la mazorca, y lo interesante de estas altas densidades es de que no hay ningún problema con la calidad del grano, por lo que definitivamente es un nuevo camino completamente diferente”.

Por último, el Ing. Cruz agregó; “cabe entender que en la agricultura no hay recetas exactas, siendo que las leyes para producir 5 toneladas de maíz por hectárea son unas, para 20 toneladas son otras, y para producir 40 toneladas de maíz por hectárea son otras muy diferentes, y no hay ningún antecedente en el mundo en esto de la hiperdensidad, y no es que no la recarguemos de muy chingones, pero si somos muy curiosos, y todo mundo me pregunta que cuanto fertilizante hay que aplicar, siendo que esto no es lineal, no es de decir, 20 unidades de nitrógeno por tonelada por 40 toneladas nos resulta en que tenemos que aplicar 800 unidades de nitrógeno, y no es así, por decir algo, en los maíces de 22 toneladas para abajo jugamos con los nutrientes clásicos, nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, magnesio, azufre, etc., pero ya en el rango de las hiperdensidades es otra cosa, aquí ya hablamos de 18 aminoácidos, 3 polisacáridos, de 2 ácidos orgánicos para los 17 nutrientes, sin duda es otro nivel, y jugamos muy fuerte con foliares, con tratamiento a la semilla y un manejo del agua sumamente preciso, son otras reglas, pero no es línea, y seguimos desarrollando los parámetros paso a paso”.

Espera la 5ª parte de este interesante reportaje, en próximas ediciones…